Investigadores
de la Universidad de Harvard Escuela John A. Paulson de Ingeniería y
Ciencias Aplicadas (SEAS) están reconsiderando la geoingeniería solar,
un proceso algunos sostienen es una forma relativamente barata para ayudar a
bajar la temperatura de calentamiento de la Tierra y compensar los problemas
causados por las emisiones de gases de efecto invernadero.La idea básica detrás de la geoingeniería solar es que inyectamos la estratosfera con aerosoles reflectantes que reflejara algo de luz lejos del planeta. Sobre la base de las secuelas de las grandes erupciones volcánicas, sabemos que grandes cantidades de aerosoles en la estratosfera hacen enfriar la Tierra, sino que también producen ácido sulfúrico, que daña la capa de ozono.
En
un estudio publicado en las Actas de la Academia Nacional de Ciencias, los
investigadores de la Universidad de Harvard proponen usar aerosoles que no
acaba de reflejar la luz de distancia del planeta, sino que también ayudaría a
evitar el agotamiento del ozono. Hablar de una solución de dos-en-uno.
"Cada
vez que usted se presenta superficies planas inicialmente no reactivos en la
estratosfera, se obtiene reacciones que finalmente resultan en la destrucción
del ozono que se recubran con ácido sulfúrico", el autor Frank Keutsch de
SEAS dijo Phys.org . "En lugar de tratar de minimizar la
reactividad del aerosol, queríamos un material que es altamente reactivo pero
de una manera que evite la destrucción del ozono."
Los
investigadores hacen hincapié en que, a pesar de que funcionaría en teoría
enfriar temporalmente el planeta, la geoingeniería solar no es una solución
permanente al problema del cambio climático. "La geoingeniería es
como tomar analgésicos", dijo Keutsch. "Cuando las cosas están
muy mal, analgésicos pueden ayudar, pero no abordan la causa de una enfermedad
y que pueden causar más daño que bien. En realidad, no sabemos los efectos
de la geoingeniería, pero es por eso que estamos haciendo esta investigación”.
UN
ANTIÁCIDO PARA LA ESTRATOSFERA
El
nuevo aerosol desarrollado por el equipo utiliza calcita, un compuesto
comúnmente se encuentra en la corteza terrestre. Normalmente, en el uso de
aerosoles como refrigerantes, uno va por sustancias menos reactivas para
mitigar los daños capa de ozono. Pero con calcita, los investigadores
tomaron el camino opuesto. "En lugar de tratar de minimizar la
reactividad del aerosol, queríamos un material que es altamente reactivo pero
de una manera que evite la destrucción del ozono," explicamos Keutsch.
Calcita
salió como la sustancia más viable para este tipo de aerosol después de que los
investigadores modelos de la química estratosférica ampliamente estudiado. Funciona
como un refrigerante, a la vez que la neutralización de ácidos con las
emisiones transmitidas para contrarrestar el daño de ozono. "Esencialmente,
terminamos con un antiácido para la estratosfera", dijo Keutsch.
El
equipo ya está probando calcita en experimentos de laboratorio que imitan las
condiciones estratosféricas, pero su trabajo aún requiere mucha más
investigación. "Química estratosférica es complicada, y que no
entendemos todo sobre él", dijo el investigador David Keith.
Geoingeniería
solar no está destinada a ser la solución al calentamiento global. Es
simplemente una medida temporal para ayudar a otros, los esfuerzos de más
envergadura, como las que promueve el acuerdo sobre el clima de París. Incluso
si se demuestra viable, la alteración deliberada de la química de nuestra
estratosfera lleva enormes riesgos que necesitan ser cuidadosamente sopesado.
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